martes, 12 de marzo de 2013


La observación atenta de las nubes, había leído o creía haber leído alguna vez, da paz, da lucidez, da calma de las buenas.  Por eso, cada día al salir de casa escrutaba las nubes y las enumeraba, las clasificaba mentalmente por espesor y forma.  Seguía sin calmarse, sin embargo. 

No hay comentarios: